-Todas las mujeres queréis lo mismo, no queréis un tío, queréis un puto superhéroe.
+Para nada.
-¿Qué no? A ver, ¿tú qué tipo de tío quieres?
+Pues yo quiero un tío que me haga tocar las estrellas, que me lleve hasta París un sábado cualquiera sólo para tomar café mirando la Torre Eiffel. Quiero que haga de sus dedos recorriendo mi piel una puta adicción para mí. Quiero un tío que nunca permita que abandone los sueños que me quedan por cumplir y me ayude a reinventar los que había dejado por imposibles. Quiero que me prometa bajarme la Luna si se la pido, que me desgaste los labios y me rompa las medias. Quiero que viva la vida sin prisas, como yo. Quiero que su único vicio sea pasar la noche conmigo y que haga que mi canción preferida sea su risa. No quiero que me regale garantías ni planes de futuro, pero sí que me prometa un “aquí y ahora”.
-Pues eso, quieres un puto superhéroe.
+Sí, tal vez tengas razón, quizás todas queramos un superhéroe, pero en realidad todas sabemos que no existe, y por eso siempre acabamos conformándonos con el primer gilipollas que nos promete mil “Te quiero” y algún que otro “Buenos días princesa”.
Tú y yo tenemos muchos amaneceres pendientes. Nunca te daré las buenas noches, siempre te daré las mejores.
Me conformo con bailar
un rato con la felicidad,
cantarle un blues,
meterle mano,
que me dé un toque.
Mario Bros nos demostró,
 que vale la pena morir por tu princesa.

¿Por qué no detienes tu vida por un instante? ¿Por qué no te permites el lujo de tener unos segundos para pensar? Para pensar en lo que realmente quieres, en lo que realmente necesitas. Sí, en lo que realmente tú quieres, no lo que quieres por contentar a las personas de tu alrededor. Porque nadie quiere aquello que se le impone, y hay cosas que simplemente se nos imponen. Lucha por la persona que tú quieres y necesitas. Lucha y actúa. ¿Por qué no te olvidas de todo, y vas a darle el beso de tu vida a la persona de tu vida?

- Te echaba de menos.
- Y yo un polvo.





Cualquier noche, incluso la más sencilla, resulta especial contigo.
Y si tú me dejas prometo hacerte la persona más feliz del mundo. Te daré cada noche tantos besos como estrellas haya en el cielo, te despertaré cada mañana con un te quiero, y cada segundo de nuestra vida compartida apostaré por ti, porque creo en ti más que en nadie. Déjame regalarte caricias y sonrisas cada minuto, déjame contarte mis secretos y poder escuchar los tuyos tumbados en el sofá mientras nos queremos. Déjame entrar a tu vida y a tu corazón.


Los caminos se bifurcan, cada uno toma una dirección pensando que al final los caminos se volverán a unir. Desde tu camino ves a la otra persona cada vez más pequeña. Y piensas, no pasa nada, estamos hechos el uno para el otro. Pero al final sólo ocurre una cosa. Otra vez llega el puto invierno.
Pienso dártelo todo. Todo pero a largo plazo, para que te quedes más tiempo a mi lado. Te mataré a besos, a abrazos, y a mil sonrisas distintas que nadie ha visto jamás. Te contaré mis secretos más íntimos, y te robaré los tuyos. Te dejaré siempre con una interrogación, para que tú busques la respuesta. Siento decirte que te enloqueceré, que te dolerá y te cabrearás, pero también te diré que te haré lo más feliz que sepa. Quiero que sepas que soy pobre de carisma, de optimismo, de razonamiento, de ilusión... pero aún tengo amor, y quiero malgastarlo contigo.
Concentrarse en los instantes de la vida, que no es en sí misma más que un instante.

- ¿A ti no te pasa que a veces estás viviendo un momento en
tu vida que es tan especial que sabes que no lo vas a olvidar nunca?
A mi me está pasando ahora mismo, contigo.